Esta es la entrevista que me hicieron para Ineverycrea, sobre la transformación metodológica que estamos construyendo en el Centro en el que trabajo. Puedes ver la entrada original AQUÍ
David Santos es el director del colegio Antonio Machado de Majadahondadesde hace 4 años, aunque lleva en él más de 12. Es maestro de infantil, primaria e inglés. Además se encarga de la coordinación TIC del centro.Es Google Certified teacher y Google certified trainer. Certificado en Flipped Classroom y embajador de varias aplicaciones y plataformas como ClassDojo o Evernote. Imparte cursos de formación al profesorado y comparte sus reflexiones sobre educación en su podcast “Píldoras de Educación”. Actualmente está liderando un cambio metodológico en su colegio.
¿Cuál era el objetivo al entrar en la dirección del colegio?
Nuestro objetivo era muy claro: queríamos realizar una transformación profunda en la metodología docente, en la forma en la que enseñamos. Y hablo de nosotros porque hemos sido todos los profesores del colegio los que estábamos convencidos de que algo había que cambiar. No puede ser que en pleno Siglo XXI y en la sociedad en la que vivimos sigamos dando nuestras clases magistrales, siguiendo el libro de texto como si fuera un manual sagrado y los niños «aprendiendo» unos contenidos que olvidan completamente una vez los «vomitan» en el examen. Es absurdo.
¿Cómo estaba el Centro cuando llegasteis a la dirección?
Yo llevo 12 años ya en el colegio. He sido maestro de Infantil y ahora estoy en Primaria. En el colegio siempre se han hecho cosas interesantes, pero había mucho individualismo. Cada uno en su aula decidía y disponía. Por supuesto había algunas cosas que se hacían en conjunto, pero se necesitaba una redefinición del Proyecto educativo. Un cambio profundo que convirtiera a los francotiradores (así llamó yo a los profes que trabajan cosas maravillosas, pero solo en sus clases) en agentes del cambio.
¿Qué creíais que era necesario cambiar, transformar?
Lo más urgente era cambiar la metodología docente. El modo tradicional de dar clase, hoy en día no es un modelo tan válido como en épocas pasadas. No les estamos preparando para vivir en la sociedad actual. Debemos poner el foco en el alumno y los profesores bajar de la tarima para estar acompañando a nuestros niños en su proceso de aprendizaje. Afortunadamente se está viviendo una época de cambio en educación. Se está haciendo mucho ruido con las metodologías activas. Pero debemos tener cuidado, porque el cambio en la metodología requiere un trabajo bien hecho y tiene que venir acompañado con una formación docente. De nada sirve hacer solo ruido, debemos obtener resultados, que de hecho, ya se están viendo.
Otra de las cosas que nos preocupaban era darle al colegio un carácter de unidad, de equipo. Los cambios y la innovación en educación solo se producirán si hay un trabajo en conjunto. Solo cuando el centro avanza como un equipo, estamos generando conocimiento común y ofreciendo educación de calidad.
Debemos reunir a los «francotiradores» en un propósito común para «tirar del carro» de la innovación. No veo otra forma de avanzar como centro, como unidad.
¿Ha habido problemas y trabas para poder cambiar el proyecto educativo del centro?
Por supuesto que todo no está siendo un camino de rosas. Te encuentras muchas dificultades en el camino. En primer lugar todo esto requiere un trabajo de coordinación increíble, y nos faltan las horas para reunirnos y sacar el proyecto del centro adelante.
Otro de los problemas que hemos tenido en mi colegio, que es un centro público, es que cada año vienen docentes nuevos y tienes que hallar la fórmula mágica para ofrecer una formación permanente para los profesores que llevan más tiempo y otra de entrada para los que no están formados en ningún tipo de metodologías activas. Nos funciona muy bien la figura de losprofesores mentores, que acompañan a los nuevos en su conocimiento del colegio y su proyecto. La gran mayoría de los profes vienen con ganas de aprender y de integrarse, pero no siempre es así.
¿Cuáles crees que son las claves para que en un centro como el tuyo se produzca un cambio?
Sin lugar a dudas los profesores, los docentes que están día a día en el aula, dejándose la piel y ofreciendo lo mejor en cada momento a nuestros alumnos. Por supuesto un centro que quiere cambiar también necesita un equipo directivo que apoye a sus maestros en el cambio y que apuesten por el proyecto. Es muy importante que el profesorado se sienta respaldado por el equipo directivo en todo lo que hacen, y nosotros eso lo hemos tenido claro desde el primer momento. Es fundamental, además, el trabajo en equipo y al unísono.
Pero sobre todo mucho trabajo y tenacidad. Además siempre debemos tener en cuenta el fin último de nuestras acciones que no es otro que nuestros alumnos.
¿Cuáles son los pilares fundamentales del Proyecto Educativo de vuestro colegio?
Principalmente hemos basado nuestro proyecto educativo en 4 pilares fundamentales:
- Cambio en la metodología docente,
- Refuerzo del plan de convivencia,
- Desarrollo de la competencia digital de profesores y alumnos y
- Participación de las familias en la vida del centro
¿Qué metodologías estáis aplicando actualmente en el Antonio Machado?
Buscamos metodologías activas en la que los alumnos sean los auténticos protagonistas de su propio aprendizaje. Que aprendan haciendo. Queremos que el aprendizaje en el colegio sean experiencias. Actualmente estamos trabajando ABP en todo Infantil y primer ciclo de primaria, hasta 3º, eliminando paulatinamente los libros de texto. En las aulas se trabaja la asamblea. Este momento es fundamental cada día, y a partir de ahí organizamos el trabajo por rincones, todo ello en cooperativo.
¿Cuáles son los aspectos fundamentales de vuestro Plan de Convivencia?
Para nosotros es fundamental que en todo este proceso de cambio exista un ambiente de calma y de convivencia entre todos. Para conseguirlo una de las piedras angulares del plan es el aprendizaje cooperativo. Poco a poco se han ido reduciendo los conflictos según lo hemos ido implementando.
También acabamos de meternos en un proyecto que nos ofreció la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid que es el proyecto «Educar para ser». Es un proyecto de desarrollo de las habilidades no cognitivas de los alumnos, bienestar y mejora del rendimiento académico a través de la inclusión. Se trata de un proyecto de innovación educativa e investigación en colaboración con la universidad de Murcia. Tenemos mucha ilusión con la puesta en marcha de este programa, que va a ir avanzando un nivel por año, por curso escolar, de tal forma que en unos 7 años tendremos todo el colegio beneficiándose del proyecto, y lo más importante el seguimiento que le vamos a hacer, para comprobar que, efectivamente ha habido una mejora del rendimiento. La gran mayoría de las actividades complementarias que realizamos están encaminadas a alcanzar un clima de convivencia óptimo entre todos nuestros alumnos. ¡Nos gusta realizar actividades en las que los alumnos de distintas edades se mezclen y se hagan responsables unos de los otros. A los alumnos de primaria les encanta hacer cosas para los de infantil!
Esencial para nosotros también es el proyecto MUS-e, por el cual se trabaja la integración, la resolución pacífica de conflictos, la no violencia, etc, a través de las artes. Llevamos más de 10 años trabajando en él y los resultados son excelentes. La mezcla de creatividad e integración ha resultado un cóctel que nos está dando muchos frutos.
¿Cómo afrontáis el tema de la competencia digital?
Al igual que con la metodología, realizamos formaciones cada curso en torno a las herramientas que usamos. Todo el centro funcionamos con las herramientas gratuitas que ofrece Google para educación. Además contamos con dos carritos de iPads y un carrito de Chromebooks, que usamos en las aulas para complementar nuestros proyectos. Una cosa que me gustaría reseñar aquí es que no debemos usar la tecnología banalmente, es decir, creemos en la tecnología y en sus virtudes pero siempre y cuando se use como una herramienta de transformación del aprendizaje. Debemos diseñar actividades con la misma que desarrollen en nuestros alumnos una serie de destrezas de pensamiento de orden superior y que redefinan las actividades de aprendizaje, que sin tecnología no hubieran podido realizarse.
¿Cómo hacéis que las familias participen en la vida del centro?
Queremos que nuestras familias formen parte del proceso de aprendizaje de sus hijos, que lo vean, que lo sientan. Les invitamos a entrar en las aulas a realizar actividades con los alumnos, colaboran en los rincones, hacemos talleres con su participación, nos acompañan a salidas y un largo etcétera. Es muy importante la transparencia y que las familias de nuestros alumnos sepan en todo momento lo que se está haciendo y cómo se está haciendo. Además intentamos compartir todo lo que hacemos en nuestra página de Facebook(https://www.facebook.com/CEBIPAntonioMachado/ ), porque no todas las familias tienen la disponibilidad horaria para acudir en horario lectivo.
¿Cuáles son vuestros siguientes retos?
Principalmente seguir avanzando en la implantación del aprendizaje basado en proyectos y aprendizaje cooperativo en los cursos superiores de primaria, afianzar el proyecto «Educar para ser» que va a ser fundamental en el futuro de nuestro colegio. Queremos empezar a hacer nuestros pinitos en robótica y formarnos en flipped learning. Pero sobre todo asegurarnos de que todo esto esta funcionando y revisar profundamente el sistema de evaluación, que evidentemente ya se está cambiando. Todo esto poco a poco. Debemos dar pasos pequeños pero seguros para que todo vaya tomando forma y encaje en nuestro proyecto educativo.
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